Las fallas en la circulación expresan falta de alegría
Los órganos sufren por cuestiones emocionales trastornos funcionales que con el tiempo se convierten en lesiones orgánicas.
Lo que nos pasa no es la causa de las dolencias, sino cómo vivimos lo que nos pasa.
La causa probable de los problemas abdominales o de los espasmos es
el miedo a no poder asimilar las experiencias; la de la acidez es el
miedo paralizante y la de las úlceras: el miedo y ansiedad por agradar
por sentirse inservible.
El aborto espontáneo también se debe al miedo, miedo al futuro. Una
preocupación por algo que ocurrirá más adelante. Nos programamos
anticipadamente y en forma inadecuada.
Los abscesos son el resultado de la fijación mental sobre heridas,
agravios, resentimientos y deseos de venganza y de la cólera
relacionada a lo que no se quiere soltar u olvidar.
Los accidentes son provocados y lesionan distintos órganos en forma
inconsciente. Las personas se predisponen a tener accidentes, por una
incapacidad de defenderse, por rebelión, por una necesidad
autodestructiva y porque creen en el valor de la violencia. Rotura de
huesos, significa rigidez, miedo a avanzar, terquedad; quemaduras:
cólera, arder de furia; torceduras: resistencia a cambiar de dirección y
las caídas significan temor o resistencia a transitar un camino.
El acné refleja la desaprobación y no aceptación de si mismo; es el sentimiento de inadecuación.
Las alergias se deben a la negación del propio poder en un mundo que
se vive como inseguro y hostil y a la incapacidad de enfrentar los
cambios.
El Alzheimer tiene también una probable causa psicológica; la
imposibilidad de adaptación, el deseo de abandonar esta vida, evadirse,
desentenderse y la incapacidad de enfrentar las cosas como son.
La amigdalitis se debe al miedo a la sofocación por la creatividad impedida y por las emociones reprimidas.
La angina a la incapacidad de hacerse valer y de pedir lo que se
necesita. En general los problemas de garganta indican dificultades para
integrar la mente con el cuerpo.
La anemia se produce por falta de alegría, la disconformidad, el
miedo a la vida, sentimiento de no ser lo bastante bueno, de no servir
para nada.
La picazón o prurito se relaciona con la culpa por el pasado y el remordimiento.
El dolor migratorio, un día una cosa otro otra, es debido al deseo de castigo y a la culpa.
La arteriosclerosis se debe a las resistencias y las tensiones, a la rigidez y estrechez mental y a la negativa de ver lo bueno.
Las articulaciones doloridas señalan problemas con los cambios en la
orientación de la vida y la facilidad o dificultad con que se llevan a
cabo.
La artritis refleja la sensación de no ser amado, la crítica y el resentimiento.
La Presbicia es el miedo al presente.
Los problemas de ovarios se relacionan con las dificultades con la creatividad.
Los problemas del páncreas se relacionan con la amargura del que se empeña en ver sólo lo malo de la vida.
La parálisis representa terror, resistencia, huída de una situación o de una persona.
Quistes o bultos en los pechos demuestran exageración de la actitud
maternal, sobreprotección, actitudes despóticas, retiro del alimento.
Pasarse de los límites.
Los problemas en la piel representan temor a perder la
individualidad, a ser sometido, expresa sensibilidad extrema y la
dificultad para integrar el adentro con el afuera.