Los científicos han estado tratando de confirmar lo que Hollywood ha
sabido durante décadas: las mujeres suelen sentirse atraídas por los
hombres con pómulos cincelados y las mandíbulas protuberantes.
Estos
y otros rasgos faciales masculinos se asocian con altos niveles de
testosterona, y las mujeres parecen saber intuitivamente este hecho.
Los estudios sugieren que las mujeres son especialmente atraídas por
los chicos de aspecto robusto cuando están en un estado particular
(cuando están ovulando), mientras que en otras ocasiones, cuando están
más interesadas en un acompañamiento, tienden a preferir un aspecto
más suave y más delicado.
No está completamente claro por qué los rasgos potenciados por la testosterona son atractivos, pero algunos expertos han propuesto que son un signo de un sistema inmunológico saludable.
La testosterona ayuda a la función inmune, por lo que un hombre con la
testosterona alta, que todavía está de pie, dice la teoría, es probable
que tenga una constitución más fuerte que el promedio. Y que va a pasar esos genes resistentes a su descendencia, haciendo de él un atractivo la elección de pareja.
En
un nuevo estudio, los hombres con altos niveles de testosterona
mostraron tender a tener sistemas inmunológicos más fuertes y rostros
que resultaban más atractivos para las mujeres. Esta relación,
sin embargo, fue especialmente pronunciada en los hombres con bajos
niveles de cortisol, una hormona del estrés implicado en la llamada
lucha o huida.
Este hallazgo, dicen los investigadores,
sugiere que los niveles de un hombre de estrés puede jugar un papel
clave en determinar si la testosterona es libre de trabajar su magia en
las mujeres.
Fuente:
http://blogdefarmacia.com/quimicos-masculinos-de-atraccion-y-repulsion/