Los beneficios del ejercicio son de alto alcance y van mucho más allá
de intentar conseguir un aspecto físico agradable. No sólo afecta al
cuerpo de muchas maneras visibles, sino que también afecta la mente.
Una de las formas en que logra esto particularmente es reduciendo el estrés. Las formas en las que el ejercicio reduce el estrés son múltiples y cada una interactúa con la mente de una manera diferente.
El primer proceso por el cual el ejercicio puede reducir el estrés es mediante la liberación de endorfinas.
Esto deja a la persona una sensación de relajación, calma y euforia. El
propósito evolutivo de este efecto era para adormecer el dolor
y aumentar las emociones positivas para ayudar al individuo en momentos
de estrés físico. Hoy en día el cuerpo interpreta el ejercicio como una
situación similar y por lo tanto libera las endorfinas para suprimir el
dolor y aumentar el estado de ánimo del deportista. Los receptores que
responden a las endorfinas son en realidad los mismos que responden a
muchas drogas recreativas como la morfina y la marihuana por lo que el
cuerpo reacciona como lo hace.
Además, actúan como una gran manera de aumentar la energía e incluso pueden ser un gran antidepresivo.
El ejercicio también aumenta la producción de testosterona, que en sí misma es una gran manera para vencer el estrés y aumentar la sensación de confianza y unidad.
El ejercicio también afecta al cerebro en sí mismo y puede llevar a la neurogénesis en ciertas áreas del cerebro (el nacimiento de nuevas células cerebrales). Esto se ha demostrado que ayuda a mejorar la memoria.
No comments:
Post a Comment