Yo 28, él 32. Siempre me han gustado los hombres que yo, siempre pensando que un hombre mayor que yo me enseñara cosas nuevas o lo que necesite en mi vida.
No puedo borrar mi mente mi primera cita con Jaime, recuerdo haberlo espera por cerca de 10 años, el fue puntual llego a lo hora, pero yo tenía ganas de verlo yo primero, así fue cuando bajo por las escaleras del metro, no creo haber visto chispas, pero lo encuentro apuesto, era la mezcla entre 2 hombres los cuales me gustaban en el liceo (sanchez-sepulveda).
Me dijo que fueramos a un patio de comida que estaba muy cerca pero antes que lo acompañe a comprar una mochila, quede pensando en mi mente, que lata, pero me servirá para conocerlo en persona y como se comporta en sociedad con otros.
Era un caballero, me encanta su trato con otros, me imagina siendo el novio de un verdadero caballero, que tratara bien lejos de la violencia, aunque siempre en las primeras citas todos nos comportamos bien. Lo que no gustaba es que era poco curioso, a primera impresión tan solo veía como correcto lo que él considera correcto. No solía ser un hombre curioso, si introspectivo, pensaba en él y sus amigos, y de cierta forma su madre.
Luego de que comprará su mochila a crédito, de hecho tenía afectivo, me di cuenta que no era muy bueno con las finanzas, su falta la racionalidad la remediaba con su carisma. No era hermoso, era guapo, usaba lentes, una vez los use y recuerdo que tenían mucho aumento, me acordaba de un libro sobre metafísica y lo que hay detrás de usar lentes "mientras más aumento tenga, más se niega ver la vida tal cual es", me imagino que Jaime vive en su propio mundo.
En nuestra primera cita, me dice acaso quiero que él me invite a comer, le digo que no gracias porque yo tengo mi dinero, pero no me alcanzaba para el postre, ese si gusta lo puede pagar él, no se quejo lo encontró justo.
Nos costo dar mucho con un lugar para charlar, fuimos a las 13:00, el patio de comida estaba lleno, yo con mi bolso lleno de hierbas y velas, me pregunta que llego en mi bolso a lo que respondo que son libros y cuadernos. Nos sentamos y charlamos.
La conversación solo hablaba de temas populares, generalmente cine y series, su pasión por el cine terror era bastante amplio, a mí no me afecta ver cine terror como el gore, entiendo que es fantasía, no existe de verdad, aunque en el póster aparezca "esto ocurrió de en la vida real", patrañas el cine es como las noticias, siempre otorgando melodrama en sus temáticas.
Luego me hablo sobre su trabajo, su trabajo era bastante rutinario era ........... Aun así le alcanzaba para vivir y comprar juegos de playstation. Fue respetuoso al hablar de su ex. Al terminar de comer nos fuimos a caminar.
Mientras caminabamos me toco a mí hablar sobre mi trabajo, me dice que su ex tenía a misma profesión pero el en cambio sufría no disfrutaba de la misma forma en como yo contaba lo que hacía.
Continua en una plaza ......
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