¿Qué es?
La presión arterial tiene dos componentes:
- la presión sistólica, o cifra de arriba, representa la presión generada por el corazón para bombear sangre al resto del cuerpo.
- la presión diastólica, o cifra de abajo, es la presión de los vasos sanguíneos entre los latidos cardíacos.
Por lo general, la presión sistólica aumenta con la edad. No
obstante, después de los 60 años, por lo general la presión diastólica
comienza a bajar debido a que los vasos sanguíneos del cuerpo se
endurecen.
La presión sanguínea se mide en milímetros de mercurio (mm Hg). La
presión sanguínea normal es la presión sistólica menor que 120 mm Hg y
la presión diastólica menor que 80 mm Hg. Las personas con presión
sistólica entre 120 y 139 o con presión diastólica entre 80 y 89 tienen
prehipertensión. La presión alta o hipertensión, está dividida en dos
etapas:
- hipertensión Etapa 1: presión sistólica entre 140 y 159 y/o la presión diastólica entre 90 y 99
- hipertensión Etapa 2: presión sistólica por arriba de 160 y/o presión diastólica por arriba de 100.
La presión alta puede dañar muchos órganos, como el cerebro, los
ojos, el corazón y los riñones, además de las arterias de todo el
cuerpo. Si tiene este tipo de presión que no ha sido diagnosticada o que
no se ha tratado adecuadamente, está en mayor riesgo de tener un ataque
cardíaco, un accidente cerebrovascular o insuficiencia renal.
Síntomas
En general, la presión sanguínea alta no causa síntomas directos.
Cuando la presión está alta, puede causar síntomas como dolores de
cabeza, mareos, cansancio y zumbido en los oídos. Sin embargo, a veces
no causa síntomas.
Diagnóstico
Debido a que el diagnóstico de presión alta depende de las lecturas
de la presión, es importante medirla con cuidadosamente. Evite el
ejercicio agotador, fumar, comer y tomar bebidas con cafeína (café, té,
sodas) al menos una hora antes de medirse la presión. Debe permanecer
sentado durante 5 minutos antes tomarse la presión, y no debe hablar
mientras se la mide. Se deben registrar dos lecturas y sacar un promedio
de ellas. Si su presión está elevada, su médico debería revisar sus
ojos, el corazón y el sistema nervioso (por si tiene algún daño
cerebral). Si el examen no demuestra que ha tenido la hipertensión desde
hace tiempo, su médico le pedirá que regrese al consultorio mínimo en
dos ocasiones para medir su presión sanguínea antes de diagnosticarle
hipertensión. Una lectura alta aislada le puede suceder a cualquiera.
Si le diagnostican hipertensión, se deberá realizar otros exámenes
para ver si la presión sanguínea elevada le ha dañado algún órgano.
Estos exámenes pueden incluir análisis de sangre para chequear la
función del riñón, y un electrocardiograma (ECG) para evaluar
engrosamiento del músculo del corazón, disminución en el flujo sanguíneo
al corazón o irregularidades en el ritmo cardíaco.
La prehipertensión con lecturas por arriba de los 120/80, pero
menores de los 140/90 en 3 ocasiones separadas, no es una enfermedad.
Sin embargo, esto significa que usted tiene un riesgo más elevado que el
promedio de desarrollar hipertensión.
Prevención
Para prevenir la presión alta debe:
- hacer ejercicio aeróbico regular
- limitar su consumo de sal y bebidas alcohólicas
- tener una dieta rica en frutas y verduras y baja en grasas saturadas
Es importante tratar de modificar todos los factores de riesgo de la
enfermedad coronaria que estén bajo su control. Además, de lo mencionado
anteriormente, debe:
- reducir su colesterol LDL alto (el colesterol “malo”).
Existen posibilidades reales de curar la presión alta sólo con
cambios en el estilo de vida, sin necesidad de recurrir a medicamentos
para la presión.
Tratamiento
Tanto los médicos como las personas con presión alta generalmente
prefieren controlarla con cambios en el estilo de vida, pero a veces se
necesita medicina para brindar un control adecuado. Los medicamentos
antihipertensivos incluyen diuréticos, betabloqueadores, inhibidores del
ECA, bloqueadores receptores de la angiotensina, bloqueadores de los
canales de calcio y bloqueadores alfa. Los médicos tienden a ser más
agresivos en el uso de medicamentos en personas con diabetes, con
enfermedades de los riñones o problemas cardíacos, ya que estas personas
tienen mayor riesgo de desarrollar problemas por la presión sanguínea
alta.
Cuándo llamar a un profesional
Los adultos deben medirse la presión alta mínimo cada par de años. Si
su presión está por arriba de 120/80 mm Hg, programe citas regulares
con su médico para controlarla y preste atención a los consejos sobre
cómo modificar su estilo de vida y prevenir problemas en el futuro.
Pronóstico
El pronóstico de la presión alta depende del tiempo que la haya
tenido alta, la severidad de su caso en particular y si padece de otras
condiciones, como diabetes, que puede aumentar el riesgo de una
enfermedad en el corazón, cerebro, ojos y riñones. Cuando la presión
alta se trata de manera adecuada, el pronóstico es más favorable.
Recuerde: la presión alta puede conducir a pronósticos malos aun si no
tiene síntomas, y que tanto los cambios en el estilo de vida como los
medicamentos pueden controlar la presión y mejorar notablemente su
pronóstico.