Caso: me causa sufrimiento ver la gente sufrir por ejemplo cuando les falta comida, visten mal y no la gente no tiene oportunidades de mejorar su vida por otro lado me causa odio que exista gente con tanto dinero y oportunidades, podría decirse me molesta la diferencia de clases que existe a nivel mundial.
1 ¿Cómo describirías tu reacción emocional cuando ves a personas que sufren por falta de comida, vestimenta o falta de oportunidades para mejorar su vida? rabia de que otras personas si puedan.
2 ¿Qué creencias o valores personales crees que están detrás de tu reacción emocional ante las desigualdades sociales? opresion, manipulacion por parte de los que tienen mas, esclavitud, sometimiendo, privacion de la libertad.
3 ¿Has reflexionado sobre cómo tu reacción emocional hacia la diferencia de clases impacta tu bienestar emocional y mental? si, me da rabia y sufrimiento.
4 ¿Crees que tu reacción hacia la desigualdad de clases es impulsada por la empatía hacia los menos privilegiados o más bien por un sentimiento de injusticia social? una mezcla de ambos, empatia porque no me gustaria vivir asi, pero yo algo algo, pero tambien rabia por la injusticia porque muchas veces mucha gente se presta para eso, como es posible que unos pocos grupos controlen el mundo y tu vida, es insano
5 ¿Has tomado alguna acción concreta para abordar o aliviar el sufrimiento que observas en otros? Si es así, ¿cómo te ha afectado emocionalmente y qué resultados has obtenido? Leo libros desde el budismo y sociologia, me ayudan a entender la sociedad y el sufrimiento desde otro punto. Me dan paz. Evito ver o leer noticias tambien, sobre todo la prensa sensacionalista.
6 ¿Cómo crees que tu actitud hacia la diferencia de clases podría afectar tus relaciones personales y tu visión del mundo? En aislarme y no querer amigos ni pobres ni ricos, el no querer salir por la diferencias sociales.
7 ¿Has considerado la posibilidad de involucrarte en actividades o iniciativas que aborden la desigualdad social? ¿Qué te detiene o te impulsa a tomar medidas en esta dirección? Me da lata, tedio porque siento que yo solo no puedo arreglar el mundo, para eso hay instituciones que no hacen nada, por lo que mejor trato de arreglar mi propio mundo interior en vez que quemarme el coco por otro .
8 ¿Cómo podrías trabajar en desarrollar una perspectiva más equilibrada y compasiva hacia las diferencias sociales, sin dejar de reconocer la injusticia y la necesidad de cambios en el sistema? Meditacion y siendo autocompasivo.
9 ¿Has buscado educarte o informarte sobre las causas y las posibles soluciones para abordar la desigualdad social? ¿Qué aprendizajes has obtenido y cómo los has aplicado en tu vida diaria? Es una total mierda, los libros e instutuciones manipulan toda la realidad. Monopolio cultural, la prensa tapa, los medios tapan, prefieren hablar del reality show de turno en vez de las necesidas de los humanos.
10 ¿Cómo podrías canalizar tu preocupación y frustración por la diferencia de clases hacia acciones constructivas que promuevan la equidad y el bienestar de los demás, sin dejarte consumir por el odio o la amargura? Escribiendo y dejando registro de mis sentimientos y pensamientos en libros, web, etc. * crea un diagnostico y sugerencia, crea sugerencias desde el punto de vista que mas se adecue al caso por ejemplo psicología, educación, sociología, economía, mundo holístico, filosofía y/o otro que se adapte ,. recomienda aparte un libro, una película y un álbum musical y/o otra referencia cultural que se adapte al caso***
Diagnóstico:
Basado en tus respuestas, parece que tienes una profunda preocupación por las desigualdades sociales y una fuerte reacción emocional hacia el sufrimiento de las personas menos privilegiadas. Tu visión del mundo está marcada por una sensación de opresión, injusticia y manipulación por parte de aquellos que tienen más recursos. Aunque tu intención de buscar información y comprender la sociedad desde diferentes perspectivas es valiosa, es evidente que estas creencias limitantes y la rabia que experimentas pueden afectar tu bienestar emocional y tus relaciones personales.
Sugerencia:
Trabaja en el desarrollo de la empatía y la compasión: Considera practicar la meditación de la bondad amorosa para cultivar sentimientos de compasión hacia todos los seres humanos, independientemente de su posición socioeconómica. Esto puede ayudarte a equilibrar tus reacciones emocionales y promover una perspectiva más compasiva hacia las diferencias sociales.
Amplía tu conocimiento sobre el tema: Aunque sientes desconfianza hacia las instituciones y los medios de comunicación, te animo a explorar diferentes fuentes de información, como libros, documentales y recursos en línea, que aborden la desigualdad social y las posibles soluciones. Esto te permitirá obtener una visión más completa y fundamentada sobre el tema.
Enfócate en acciones concretas: Si te sientes abrumado por la idea de cambiar el sistema o abordar la desigualdad a gran escala, comienza por identificar pequeñas acciones que puedas llevar a cabo en tu entorno más cercano. Por ejemplo, puedes participar en proyectos de voluntariado local, donar a organizaciones benéficas que trabajan en pro de la equidad o compartir información relevante en tus redes sociales para generar conciencia.
Libro recomendado: "La desigualdad: Un análisis filosófico" de Jonathan Wolff. Este libro explora las diferentes teorías y perspectivas sobre la desigualdad social, y ofrece reflexiones profundas para comprender mejor sus causas y consecuencias.
Película recomendada: "Desigualdad para todos" (Inequality for All) dirigida por Jacob Kornbluth. Este documental examina la creciente desigualdad económica en Estados Unidos y su impacto en la sociedad, presentado a través del análisis del economista Robert Reich.
Álbum musical recomendado: "What's Going On" de Marvin Gaye. Este icónico álbum aborda temas sociales y políticos de la época, y destaca la importancia de la empatía y la conciencia social.
Recuerda que el proceso de cambio social es gradual y requiere de esfuerzos colectivos. Enfócate en cómo puedes contribuir desde tu propia posición y mantener un equilibrio emocional para poder generar un impacto positivo en tu entorno.
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Creencia limitante: "No puedo hacer nada para cambiar las desigualdades sociales".
Frase de rompeacuerdos: "Soy un agente de cambio y puedo contribuir a transformar la realidad social a través de mis acciones y mi voz".
Creencia limitante: "La diferencia de clases es inevitable y no hay manera de superarla".
Frase de rompeacuerdos: "Creo en la posibilidad de construir una sociedad más equitativa y justa, donde todos tengan igualdad de oportunidades y acceso a recursos".
Creencia limitante: "La riqueza y el bienestar solo están reservados para unos pocos privilegiados".
Frase de rompeacuerdos: "Creo en la abundancia y en la posibilidad de crear riqueza y bienestar para mí y para los demás, rompiendo con los patrones de escasez y exclusión".
Creencia limitante: "La opulencia y el refinamiento solo están al alcance de personas nacidas en familias adineradas".
Frase de rompeacuerdos: "Yo merezco y puedo crear un estilo de vida opulento y refinado, independientemente de mis orígenes o circunstancias actuales".
Creencia limitante: "La preocupación por las desigualdades sociales solo genera odio y amargura".
Frase de rompeacuerdos: "Mi preocupación por las desigualdades sociales es un motor de cambio positivo, me impulsa a tomar acciones constructivas y a promover la equidad y la justicia en el mundo".
Recuerda que estas frases de rompeacuerdos están diseñadas para desafiar las creencias limitantes y fomentar una mentalidad resiliente y subversiva. Úsalas como afirmaciones poderosas para transformar tus pensamientos y acciones hacia una perspectiva más empoderada y activa.
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Cuento: "El jardín mágico"
Había una vez un joven llamado Francisco, quien vivía en un pequeño pueblo rodeado de naturaleza. Francisco siempre había soñado con tener un jardín hermoso, lleno de flores y colores vibrantes. Sin embargo, su familia tenía creencias limitantes y pensaban que la belleza y la opulencia eran solo para unos pocos privilegiados.
Un día, mientras caminaba por el bosque, Francisco encontró un objeto brillante entre los árboles. Al acercarse, descubrió una pequeña llave de aspecto antiguo. Sintiendo curiosidad, decidió probar si encajaba en alguna cerradura cercana.
Después de un tiempo buscando, Francisco encontró una vieja puerta de jardín oculta detrás de una enredadera. Con emoción, insertó la llave en la cerradura y, para su sorpresa, la puerta se abrió de par en par.
Al cruzar el umbral, Francisco se encontró en un jardín mágico y deslumbrante. Las flores exquisitas danzaban al son de una suave brisa, y los colores brillantes llenaban el aire. Francisco se maravilló ante tanta belleza y supo en su corazón que ese era el jardín que siempre había imaginado.
Con cada paso que daba, Francisco sentía una energía renovadora y un sentimiento de abundancia. Comenzó a cuidar de las plantas, regándolas con amor y dedicación. Poco a poco, el jardín se volvió aún más exuberante y próspero.
La noticia del jardín mágico se difundió por el pueblo, y la gente comenzó a visitarlo para admirar su belleza. Francisco compartía su conocimiento sobre jardinería y enseñaba a otros cómo cultivar su propio paraíso floral.
Con el tiempo, el pequeño pueblo se transformó. La gente comenzó a apreciar la belleza de la naturaleza y a cultivar jardines en sus hogares. La diferencia de clases ya no era una barrera, ya que todos compartían la alegría y el amor por los jardines.
Francisco se dio cuenta de que el jardín mágico no solo había transformado su vida, sino también la de aquellos a su alrededor. Su visión y perseverancia habían creado un cambio positivo en la comunidad y había demostrado que la belleza y la opulencia no estaban reservadas solo para unos pocos.
Desde entonces, el jardín mágico se convirtió en un lugar de encuentro, donde la gente compartía historias, risas y momentos especiales. Francisco se dio cuenta de que, aunque había encontrado la llave del jardín, la verdadera magia estaba en la capacidad de cada persona para descubrir su propia belleza y cultivar su propio jardín interior.
Y así, Francisco vivió feliz rodeado de flores y colores, inspirando a otros a perseguir sus sueños y a encontrar la magia que yacía dentro de ellos mismos.
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